
Colombia recibió de Brasil la sede de la II Conferencia Internacional de Reforma Agraria y Desarrollo Rural (CIRADR +20), que se realizará en Cartagena del 24 al 28 de febrero de 2026.
La primera conferencia tuvo lugar en 2006, en Brasil. Dos décadas después, Colombia será escenario del evento en el que se esperan más de 1.500 delegados de, por lo menos, un centenar de países.
Los temas clave de la reforma agraria
Como actividades previas a la segunda Conferencia, se han programado siete encuentros regionales para construir el Plan Decenal de la Reforma Agraria 2026 - 2036.
Entre los temas a tratar están:
- La redistribución de la tierra y marcos normativos internacionales
- Finanzas climáticas y mecanismos para la restauración
- Uso sostenible de los suelos
- Soberanía alimentaria
- Sistemas alimentarios territoriales
- Circuitos cortos
- Derechos de las mujeres rurales, juventudes y pueblos étnicos
- Reforma institucional para garantizar gobernanza democrática de los territorios
Guayacán: símbolo de un legado
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, Laura Sarabia; la ministra de Agricultura, Martha Carvajalino; el ministro de Desarrollo Agrario de Brasil, Paulo Teixeira, y el representante de la FAO en Colombia, Agustín Zimmermann, explicaron las razones por las cuales el país acogerá este evento sobre la tenencia de la tierra y su uso sostenible.
La canciller Sarabia expresó su respaldo a la realización de la II Conferencia, y destacó el papel crucial que MinAgricultura, en cabeza de Martha Carvajalino, ha trazado para que la Reforma Agraria del Gobierno del Cambio sea “un instrumento de paz”.
En su intervención agregó que “Colombia se ha preparado con toda su capacidad institucional, su capacidad técnica y política para albergar la segunda conferencia internacional de reforma agraria y reforma rural. Será un momento histórico para nuestra región y nuestro país”. Por esto “hemos decidido Reflexionar sobre los desafíos mas urgentes de nuestro tiempo: cómo construir una nueva estructura en el uso y la tenencia de tierra para que sea justa, eficiente y sostenible”.
Por eso, jefe de cartera agropecuaria, Paulo Teixeira, entregó a la ministra Carvajalino un guayacán como símbolo de esta segunda conferencia, augurando los mejores éxitos para el desarrollo de este evento que se espera culmine con una declaración para que Colombia sea líder global en política agraria, reconciliación territorial, transición agroecológica y justicia ambiental.
Este guayacán, árbol originario de América, iba sobre una matera de barro con una ilustración que refleja las luchas campesinas y étnicas por la tenencia justa de la tierra, la seguridad alimentaria de los pueblos y la dignidad sobre sus territorios.
“Recibo con la más profunda alegría, el orgullo y el honor de un país hermano, de un país solidario, estas llaves y el legado de la II Conferencia Internacional de la Reforma Agraria y Desarrollo Rural. Es un legado para la vida y para el futuro del mundo”, declaró la ministra Carvajalino.
El ministro Teixeira, a su turno, indicó que “Colombia representa demasiado para nosotros, empezando por Gabriel García Márquez y sus obras como Cien años de soledad, El amor en los tiempos del cólera y El general en su laberinto. Colombia está en un momento de transformación muy importante que pasa por la implementación del Acuerdo Final de Paz de 2016 y eso hace que seamos más unidos como naciones”.
“Invito a todo el movimiento social de todas las naciones para que se una a la II Conferencia, para construir esta gran discusión, esta gran deliberación y hablar de nuestro lema: la tierra para trabajarla, la tierra para producir, pero la tierra para comer, para comer de manera sostenible y sana. La tierra, en fin, una apuesta para la vida”, concluyó la ministra.
Fuente: El Espectador