Hoy, con profunda tristeza, toda la familia de la UAEOS siente un vacío enorme y la ausencia de uno de sus queridos integrantes. El pasado sábado, William Andelfo, aquel alegre compañero de saludo gentil y eterna disponibilidad y servicio, sorprendentemente abandonó este camino que transitamos en la vida.
Lo recordamos por su amabilidad incondicional, don de gentes y su incansable compromiso con la labor que desempeñó en los grupos de gestión que le acogieron a lo largo de estos tres años de servicio a la Entidad.
Incansable y comprometido con sus funciones, William siempre tendía una mano amiga para colaborar a quien necesitara de un apoyo, un consejo o un favor.
La vida le otorgó una maravillosa familia… una esposa amorosa y un par de hijos que eran el norte de su brújula. Lo conocimos como un padre dedicado a su hogar, responsable y comprometido con todas las causas y tareas que realizaba no solo en la UAEOS, sino en el seno de su querida familia.
Para ellos, nuestro incondicional apoyo en este momento difícil y toda la solidaridad que caracteriza a esta cofradía de funcionarios que hoy, lamentamos su partida y lo extrañaremos y recordaremos como una persona única y muy especial.
