En un esfuerzo conjunto por visibilizar la riqueza cultural y natural de la Guajira, lanzamos la ruta turística “Camarones Corazón Solidario”, una propuesta que nace por parte de la Unidad Solidaria y las comunidades, articulando el trabajo de más de 15 organizaciones locales. Esta iniciativa representa mucho más que un recorrido turístico: es una apuesta por el turismo solidario como herramienta de transformación social, económica y cultural.
El turismo solidario promueve un modelo alternativo de desarrollo que pone en el centro a las personas, las comunidades y sus saberes, reconociendo su papel como actores fundamentales en la construcción de propuestas sostenibles y con identidad. A través de esta ruta, se fomenta la participación directa de las comunidades, generando ingresos, fortaleciendo la economía local y promoviendo el cuidado del entorno natural y cultural.
“Camarones Corazón Solidario” ofrece una experiencia auténtica e inmersiva en la que visitantes nacionales e internacionales pueden conocer de cerca la riqueza de la cultura Wayuu, su cosmovisión, su música, sus cuentos tradicionales y sus danzas. También permite disfrutar del arte de las artesanías tejidas a mano, la pesca artesanal, el avistamiento de flamencos y otras aves, y la exquisita gastronomía local.
Cada paso del recorrido resalta el valor de las tradiciones ancestrales y el potencial turístico del territorio, haciendo del turismo una herramienta de empoderamiento para las comunidades que lo habitan. En este sentido, la ruta no solo promueve la conservación de la biodiversidad y el patrimonio cultural, sino que también refuerza el tejido social, la organización comunitaria y el sentido de pertenencia.
El turismo también puede ser solidario. Esta ruta es una muestra clara de cómo, a través de la colaboración, la participación activa y el reconocimiento del otro, es posible construir modelos sostenibles que beneficien a todos. “Camarones Corazón Solidario” invita a conocer, aprender y compartir desde el respeto, la equidad y el cuidado colectivo.
En cada visita, no solo se recorren paisajes; se camina junto a comunidades que abren sus puertas, comparten sus historias y nos muestran que otro turismo es posible: uno que construye, une y transforma desde el corazón solidario de nuestros territorios.
