
El programa Formar para emprender en asociatividad solidaria, de la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarias, es implementado por más de 120 maestros de 27 colegios de Cundinamarca, con lo que se benefician más de 3.000 estudiantes.
Los jóvenes y niños que viven en las provincias de Alto Magdalena, Gualivá, Ubaté y Oriente, del departamento de Cundinamarca, hacen parte de este programa implementado por la Unidad Administrativa desde 2015.
Para Nidia Yamile Patiño, profesional del Grupo de Educación e Investigación de la Unidad Administrativa, el Programa ha logrado que docentes de otras áreas, que no dictan la asignatura de emprendimiento solidario, se involucren con el tema:
“Las herramientas pedagógicas de Formar para emprender han sido tan importantes que ahora los profesores de las materias de matemáticas, español, biología, etc., se involucran y aportan a la pedagogía de la cultura solidaria”.
El Programa de Educación Solidaria Formar para emprender en asociatividad solidaria, busca que los docentes de instituciones educativas de básica y media del departamento de Cundinamarca repliquen la cultura solidaria en sus colegios.
“Este programa tiene el énfasis de la promoción de una cultura solidaria. Y la comunidad que tenemos de trabajo son los colegios, porque aquí está la semilla que podemos cultivar en esos escenarios, una nueva forma de ver lo colectivo, de construir sociedad. Es muy importante porque estamos sembrando esa semilla en los estudiantes para que en un futuro ellos sean los protagonistas de la economía solidaria colombiana”, agregó.
Algunos de las instituciones educativas que imparten el programa en Cundinamarca son: Bolívar y Bruselas de la provincia de Ubaté; el Bagazal y El Vino de la provincia de Gualivá; IPEBI y la IED Monseñor Agustín Gutiérrez - IDEMAG -, de la provincia Oriente.
Inírida Constanza Rodríguez, docente de la Institución educativa Bruselas del municipio de Ubaté, destaca la importancia del programa:
“Ellos están aprendiendo a diferenciar una empresa financiera de una asociativa, ya identifican qué es una cooperativa, cómo pueden ser asociados y qué ganan cuando hacen parte de una organización de economía solidaria”.
Asimismo, el docente de la institución educativa Bagazal, de la provincia de Gualivá, Esteban Moreno Medellín, resalta los logros del programa en sus estudiantes:
“Ellos han empezado a entender qué en equipo pueden llegar más lejos, y esto se evidencia con la cooperativa estudiantil que constituimos en el colegio con los estudiantes y profesores. Con esta nueva organización ellos tienen como objetivo ahorrar para luego comprar sus cosas”.
Con la implementación del programa Formar para emprender en asociatividad solidaria, los niños y jóvenes identifican, entre otros, sus capacidades de emprendimiento y transformar su vida.